El efecto del nuevo comienzo es la tendencia a perseguir nuevos objetivos después de un hito temporal, como unas vacaciones o el cumpleaños. Una explicación de este efecto es que los hitos temporales actúan como una separación psicológica entre el pasado y el presente de la persona, motivando a las personas a perseguir sus objetivos a pesar de los fracasos anteriores. Un ejemplo de este fenómeno es la popularidad de los propósitos de Año Nuevo.