Una característica fundamental de la psicología humana es que nuestra atención es un recurso limitado. La atención es un proceso cognitivo que nos permite centrarnos en cierta información y descartar otra. Nuestra atención se dirige típicamente como resultado de dos procesos. Un "proceso de arriba hacia abajo" dirige nuestra atención a los elementos que son necesarios para completar una tarea que estamos realizando, como buscar a nuestra pareja en una fiesta. Mientras tanto, un "proceso de abajo hacia arriba" dirige nuestra atención a los elementos que destacados en el entorno, como un ruido fuerte en la calle.